· Publicado en Monográfico Andalucía Solidaria con la Población Refugiada

“No podemos permitir que haya mafias que estén aprovechando la política de puertas cerradas en países de la Unión Europea”

“No podemos permitir que haya mafias que estén aprovechando la política de puertas cerradas en países de la Unión Europea”

La militarización de la frontera entre Eslovenia y Croacia es solo un ejemplo más de las malas políticas que los estados europeos están poniendo en marcha frente a la huida de personas en zonas de conflicto. Así lo ha destacado Virginia Álvarez, responsable de Política Interior de Amnistía Internacional España en la Onda Local de Andalucía. En sus declaraciones denuncia que las políticas de puertas cerradas está fomentando el negocio de las mafias y dejando desasistidos a los demandantes de asilo.

ESCUCHAR ENTREVISTA

¿Cómo afecta a los refugiados la decisión tomada recientemente por el Parlamento de Eslovenia?

Estamos ante una nueva respuesta de la falta de coordinación a la crisis de refugiados actual en nuestro continente. Europa está viviendo el mayor flujo de refugiados que ha tenido en décadas pero no tenemos que olvidar que el 86 por ciento de las personas que busca asilo están fuera de nuestras fronteras, en países pobres y en vías de desarrollo. Es realmente dramático que Europa sea incapaz de gestionar estos flujos para ofrecer esta protección internacional que necesitan estas personas.

¿Y cómo están viviendo la situación estos refugiados que están sufriendo tantos obstáculos?

Hemos hablado con muchos de ellos. La mayoría tenían una vida totalmente normalizada y han tenido que marcharse solo por salvar la suya y la de sus hijos porque había guerra en sus países o por persecución. Y a su llegada lo que lo que se encuentran es una falta de solidaridad absoluta de países que tienen medios y mecanismos para acogerlos.

Por poner un ejemplo, los países del entorno de Siria, se ha acogido al 95% de los refugiados que han escapado pero las condiciones en estos países están resultando demasiado duras para estas personas que huyen del terror.

Ante el flujo de estos países, Europa solo se ha preocupado por ver cómo podía blindar las fronteras. Es solo una consecuencia de las medidas adoptadas en Grecia, Hungría o Eslovenia y destapa lo que está pasando en el entorno de la Unión.

Ahora que llega la época de frío ¿cómo va a afectar a la situación de la población refugiada?

Eso es una preocupación grande porque llega el invierno y las autoridades de los países de la Unión Europea siguen discutiendo sobre cómo sus derechos están siendo vulnerados. Realmente es una situación grave y muy preocupante la parálisis y la inacción para buscar una solución en coordinación con los principios internacionales que los países europeos vienen defendiendo hasta ahora.

El 9 de noviembre se vuelven a reunir los países europeos para tratar esta temática ¿qué medidas podrían acordarse?

Amnistía Internacional lleva pidiendo a las autoridades de los países europeos una serie de medidas con una agenda de once puntos como una creación de una ruta legal para llegar a zonas seguras, también pedimos implementar los programas de reasentamiento siguiendo la demanda de ACNUR porque hay población muy vulnerable que debe llegar a un país seguro sin tener que jugarse la vida. También defendemos que se cumplan las medidas de salvamento para que sigan siendo una prioridad.

Cuando nos fijamos en estas personas que hacen este peligroso recorrido hay que tener en cuenta que también son rutas muy caras. ¿Es cierto que la gente que tiene menos recursos ni siquiera tienen la opción de huir?

La falta de rutas legales y de traslado coordinado con ACNUR acrecientan el negocio de las mafias que trafican con estas personas. Eso obliga que que lleguen solo los que tiene un mayor poder adquisitivo.

No podemos permitir que haya mafias que se estén aprovechando esta política de puertas cerradas como países de la Unión Europea.