· Publicado en Monográfico Objetivos de Desarrollo Sostenible y Gobiernos Locales

El Pacto Global de las Migraciones se propone erradicar el tráfico de personas

El Pacto Global de las Migraciones se propone erradicar el tráfico de personas

Una cumbre internacional en el Marruecos, en el mes de diciembre, será el escenario de la adopción del Pacto Global de las Migraciones promovido por Naciones Unidas, finalizada la ronda de negociaciones en el verano de 2018. El documento recupera metas del Objetivo 10 para la reducción de las desigualdades, el Objetivo 16 para la paz y la justicia, y Objetivo 5 para la igualdad de género. El pacto es el resultado del acuerdo que líderes internacionales acordaron abrir en 2016 para alcanzar dos grandes acuerdos acerca de las migraciones y sobre la población refugiada.

Como señala la Organización Internacional de las Migraciones, la declaración de Nueva York fue un primer hito en el reconocimiento de que las migraciones y la solicitud de refugio se habían convertido en un asunto fundamental en la agenda internacional. Fruto de aquella cita, 193 países integrantes de la ONU acordaron iniciar un proceso de consulta para adoptar un Pacto Mundial para una migración segura, regular y ordenada, en el marco de una conferencia intergubernamental que tendría lugar en 2018.

De aquel grupo se descolgaron dos países: Estados Unidos anunció su retirada en diciembre de 2017, según publicó la prensa internacional, porque su presidente, Donald Trump, consideró que "no podía apoyar un proceso que socava el derecho soberano de Estados Unidos a aplicar nuestras leyes sobre inmigración y asegurar las fronteras". Apenas finalizado el documento, Hungría también anunció su retirada: "este paquete anima los procesos migratorios de manera insensata y solo tiene en cuenta los intereses de África, América Latina y pequeños estados insulares cuando determina que la emigración es un derecho fundamental”, dijo el ministro húngaro de Exteriores, Péter Szijjártó. También rechazó que las fronteras fueran gestionadas desde una cuestión de derechos humanos, abogando por hacerlo desde la perspectiva de la seguridad.

La respuesta que dio a ello el presdente de la Asamblea General de la ONU, Miroslav Lajcak, confirma la debilidad del acuerdo: no es obligatorio ni vinculante, sus indicaciones solo suponen una expresión de voluntades desde una perspectiva de las migraciones que la ve como fuente de prosperidad, innovación y desarrollo sostenible en un mundo globalizado.

La lucha contra la trata de personas, muy presente en el Pacto

El Pacto Global para la Migración Segura, Ordenada y Regular se abordará finalmente en diciembre de 2018 en Marruecos, tal y como aparece en la versión final del borrador aprobado en julio de 2018. Está previsto que se reúnan los días 10 y 11 de diciembre para aprobar un documento que contiene en sí mismo la intención de promover la lucha contra las raíces de la desigualdad que está en el origen de las migraciones, en la mayoría de las ocasiones. Por eso, reproduce el epígrafe de la Meta 10.7 "Facilitar la migración y la movilidad ordenadas, seguras, regulares y responsables de las personas, incluso mediante la aplicación de políticas migratorias planificadas y bien gestionadas", y también contiene numerosas referencias a la lucha para la erradicación del tráfico de personas, contenido en otras Metas: 

  • Meta 5.2, "Eliminar todas las formas de violencia contra todas las mujeres y las niñas en los ámbitos público y privado, incluidas la trata y la explotación sexual y otros tipos de explotación".
  • Meta 8.7 "Adoptar medidas inmediatas y eficaces para erradicar el trabajo forzoso, poner fin a las formas contemporáneas de esclavitud y la trata de personas y asegurar la prohibición y eliminación de las peores formas de trabajo infantil, incluidos el reclutamiento y la utilización de niños soldados, y, de aquí a 2025, poner fin al trabajo infantil en todas sus formas".
  • Meta 16.2 "Poner fin al maltrato, la explotación, la trata y todas las formas de violencia y
    tortura contra los niños".

En concreto, entre sus 23 objetivos, en el Objetivo 10 el Pacto se propone "prevenir, combatir y erradicar la trata de personas en el contexto de la migración". Tambien en relación con la reducción de la vulnerabilidad en las migraciones, Objetivo 7 del Pacto, se contempla el establecimiento de políticas integrales y desarrollar alianzas que brinden a los migrantes en una situación de vulnerabilidad, independientemente de su estado migratorio, con el apoyo necesario en absoluto etapas de la migración, mediante la identificación y la asistencia, así como la protección de su los derechos humanos, en particular en los casos relacionados con las mujeres en situación de riesgo, (...)  víctimas de la trata de personas personas y migrantes sujetos a explotación y abuso en el contexto del tráfico ilícito migrantes". El Pacto invita al fortalecimiento de la respuesta transnacional ante el contrabando de personas migrantes, Objetivo 9, concretando la necesidad de "diseñar, revisar o enmendar políticas y procedimientos relevantes para distinguir entre delitos de tráfico ilícito de migrantes y trata de personas utilizando las definiciones correctas y aplicando respuestas distintas a estos crímenes diferentes, y reconociendo que el contrabando los migrantes también podrían convertirse en víctimas de la trata de personas, lo que requiere la protección y asistencia apropiadas".

El Objetivo 10 aborda la prevención, la lucha y la erradicación del tráfico de personas en el contexto de las migraciones internacionales, y en este epígrafe, incluye el compromiso de "tomar medidas legislativas o de otro tipo para prevenir, combatir y erradicar el tráfico de personas en el contexto de la migración internacional mediante el fortalecimiento de capacidades y cooperación para investigar, enjuiciar y sancionar la trata de personas, desalentando la demanda que fomenta la explotación que conduce a la trata y que pone fin a la impunidad de las redes de tráfico", además de, incluir un compromiso adicional para "mejorar la identificación y protección y asistencia a los migrantes que se han convertido en víctimas de la trata, prestando especial atención a las mujeres y los niños". Para ello, las políticas se orientarán a:

  1. Promover, ratificar, adherir e implementar el Protocolo para Prevenir, Suprimir y sancionar la trata de personas, especialmente mujeres y niños, complementando la Convención de las Naciones Unidas contra la Delincuencia Organizada Transnacional (UNTOC.
  2. Promover la aplicación del Plan Global de Acción para Compatir la Trata de Personas, y tomar en consideración las recomendaciones pertinentes de UNODC y y otros documentos pertinentes de la ONUDD al desarrollar e implementar políticas y medidas nacionales y regionales relacionadas con la trata de personas.
  3. Monitorear las rutas de migración irregulares que podrían ser explotadas por redes de trata de personas para
    reclutar y convertir a migrantes en víctimas de trata de personas, de tráfico ilícito o de contrabando, a fin de fortalecer la cooperación en niveles bilaterales, regionales e interregionales de prevención, investigación y persecución de traficantes, así como en la identificación y protección y asistencia a las víctimas de
    tráfico de personas.
  4. Compartir información relevante a través de redes transnacionales y mecanismos regionales, incluido el modus operandi, los modelos económicos y las condiciones de funcionamiento de las redes de trata de personas, fortalecer la cooperación entre todos los actores pertinentes, incluidos las unidades de inteligencia, reguladores e instituciones financieras, para identificar e interrumpir los flujos financieros asociados con la trata de personas, y mejorar la cooperación judicial y la aplicación con el objetivo de garantizar la rendición de cuentas y poner fin a la impunidad.
  5. Aplicar medidas que aborden las vulnerabilidades particulares de mujeres, hombres, niñas y niños,
    independientemente de su estado migratorio, que se hayan convertido o estén en riesgo de convertirse en víctimas de trata de personas y otras formas de explotación, facilitando el acceso a la justicia e
    informes seguros sin temor a la detención, la deportación o la pena, centrándose en la prevención,
    identificación, protección y asistencia apropiadas, y abordando formas específicas de abuso y explotación.
  6. Asegurar que las definiciones de trata de personas utilizadas en la legislación, política migratoria y
    planificación, así como en los procesos judiciales están de acuerdo con el derecho internacional,
    para distinguir entre los delitos de la trata de personas y el tráfico ilícito de migrantes.
  7. Fortalecer la legislación y los procedimientos pertinentes para mejorar el enjuiciamiento de los traficantes, evitar criminalización de migrantes que son víctimas de la trata de personas por delitos relativos a la trata de personas, y garantizar que la víctima reciba la protección y asistencia adecuadas.
  8. Proporcionar protección y asistencia a los migrantes que han sido víctimas de la trata de personas con medidas para la recuperación física, psicológica y social, así como aquellas otras que les permitan permanecer en el país de destino, temporal o de forma permanente, en los casos apropiados, facilitar el acceso de las víctimas a la justicia, incluida la reparación y compensación, de conformidad con el derecho internacional.
  9. Crear sistemas de información nacionales y locales y programas de capacitación que alerten y
    eduquen a la ciudadanía, los empleadores, así como a los funcionarios públicos y los agentes del orden, y
    fortalecer las capacidades para identificar los signos de la trata de personas, como la obligatoriedad, la obligación o el trabajo infantil, en los países de origen, tránsito y destino.
  10. Invertir en campañas de sensibilización, en asociación con las partes interesadas pertinentes, para alertar a los migrantes y posibles migrantes sobre los riesgos y peligros de la trata de personas, y brindarles información sobre cómo prevenir y reportar actividades de tráfico.

El Objetivo 12 de los 23 que contiene el Pacto también se refiere al tráfico de personas proponiendo "desarrollar y llevar a cabo la formación en derechos humanos especializados a los cuerpos especializados de primera atención y funcionarios del gobierno, incluida la formación sobre la aplicación de la ley a autoridades, funcionarios fronterizos, representantes consulares y órganos judiciales, para facilitar y estandarizar la identificación y derivación, así como la asistencia y el asesoramiento adecuados de una manera culturalmente sensible, a las víctimas de la trata de personas, los migrantes en situaciones de vulnerabilidad, incluidos los niños, en particular los que no están acompañados o separados, y personas afectadas por cualquier forma de explotación y abuso relacionado con el tráfico ilícito de migrantes, bajo circunstancias agravantes".

Esta referencia a la formación en capacidades específicas se reitera en el Objetivo 14, en referencia al fortalecimiento de las capacidades consulares para "identificar, proteger y asistir a los nacionales que se encuentren en otros países en situación de vulnerabilidad, incluyendo a las víctimas de violaciones de los derechos humanos y laborales, abuso, víctimas de delitos, víctimas de la trata de personas, migrantes sujetos a contrabando en circunstancias agravantes, y los trabajadores migrantes explotados en el proceso de reclutamiento" (...).

En definitiva, el documento mantiene la alerta sobre las migraciones como una estrategia de ocultamiento del tráfico de personas, así como un proceso que deja a las personas en una situación de vulnerabilidad tal que la puede convertir facilmente en víctima de trata.

Un planteamiento global para un enfoque mundial de la gestión de las migraciones

El documento no solo aborda la erradicación de trata de personas. También contiene una mirada amplia hacia las migraciones, abordando los aspectos humanitarios, de desarrollo, relacionados con los derechos humanos y otros; se presenta como una contribución importante a la gobernanza global y la mejora de la coordinación en la migración internacional; presentar un marco para la cooperación internacional integral sobre migrantes y movilidad humana; establece una serie de compromisos viables, medios de implementación y un marco para el seguimiento y el examen entre los Estados Miembros con respecto a la migración internacional en todas sus dimensiones.

El Pacto se guía la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible y la Agenda de Acción de Addis Abeba; y
estar informado por la Declaración del Diálogo de Alto Nivel de 2013 sobre Migración Internacional y Desarrollo.

En diciembre, 191 Estados tendrán la responsabilidad de aprobar un documento cuyos compromisos son, a día de hoy, clave para garantizar el derecho legítimo de las personas a la movilidad y la búsqueda de una vida en mejores condiciones de acceso a desarrollar sus capacidades en libertad.

 

Con estas acciones, el FAMSI quiere contribuir a la consecución de la Agenda 2030, y en particular, de los objetivos:

    
Objetivo 5: Lograr la igualdad entre los géneros y empoderar a todas las mujeres y las niñas.

 
Promover el crecimiento económico sostenido, inclusivo y sostenible, el empleo pleno y productivo y el trabajo decente para todos/a.

 
Objetivo 10: Reducir la desigualdad en y entre los países.

 
Objetivo 11: Lograr que las ciudades y los asentamientos humanos sean inclusivos, seguros, resilientes y sostenibles.

 
Objetivo 16: Promover sociedades justas, pacíficas e inclusivas.